Capítulo 6, "Insultos"
Me tratan como a un juguete.
La fotógrafa anoréxica de unos 46 kilos me pone una mano en la cintura y me dice que levante mi cabeza y la ladee. Luego suelta algo así como... "No, así no. Así". Y lo tengo que hacer de nuevo hasta que pierde la paciencia y ella misma me mueve.
Ella pone una mano en mi cabeza, ladeándola. Suspiro.
Ellie me sonríe, comprensiva.
Laura agita la cabeza.
La miro, horrorizada.
Ellie ríe.
Me cruzo de brazos y la fotógrafa anoréxica da un respingo. Se mueve y me acomoda la cabeza, y le dice a Ellie, que está sentada a mi lado, que incline la cabeza hacia atrás, de forma que su cabello caiga en su espalda.
Laura está detrás, mirándonos fijamente.
Suspiro.
Quiero terminar con esto.
Sonrío.
Laura me mira de nuevo.
Quiero decirle que se vaya al diablo.
Suspiro.
No lo hago.
Después Laura intercambia un par de palabras con la fotógrafa y sonríe cordialmente a Ellie.
Esa es mi señal. Suspiro de alivio y me bajo del maldito sillón. Ellie me mira bajar y jala el borde se su vestido.
Cuando es mi turno, yo palpo el estúpido vestido violeta que Laura me eligió y subí de nuevo. Pero esta vez ella quitó el sillón junto con la fotógrafa, y me dijeron que modelara parada.
Yo no sé modelar, así que me quedé ahí con los brazos colgando de cada lado, flojos.
La anoréxica suspiró y subió a arreglarme.
Me erguí de golpe.
Así de insoportable puede ser.
Estamos esperando a qué sea hora de la película.
Ellie y yo dejamos a Lucas haciendo fila para comprar los boletos mientras nosotras vamos a comprar los dulces.
Sonrío.
Ellie me mira unos instantes y sacude su cabello con la mano del tatuaje.
Levanto la ceja.
Sacudí la cabeza.
Ellie sonríe.
Por supuesto que sí.
Ellie pide tres cajas de pasitas de chocolate cuando llega la muchacha que atiende y luego se gira hacia a mí.
Me hecho a reír.
Pues resulta que Ellie tomó tanta soda que al final de la película fue corriendo al baño.
Me quedo ahí sentada en la banca junto a Lucas, a penas hemos intercambiado unas palabras desde que llegamos a la película. He preferido quedarme pegada a Ellie en vez de entablar con él una conversación acerca de cómo no llamé.
Ciertamente, estoy de acuerdo.
Asiento.
Él agita la cabeza.
Rio.
Él me mira.
Yo lo miro.
Y es que en verdad lo siento.
Por alguna remota razón en este confuso mundo.
El sonríe.
Honestamente, jamás había oído decir a alguien "No te fastidies tanto".
Y menos a un chico.
A menos que fuera de ese tipo que lee libros.
Lo miro de pies a cabeza.
Sacudo la cabeza.
¿Cuales son las posibilidades de que tenga cerebro?
El ríe.
Sacudo la cabeza de nuevo y cruzo las piernas.
El asiente y apoya los codos en las rodillas.
Levanta una ceja.
No se ve confuso ni nada.
Sólo levanta una ceja.
El pasa las manos por su rostro mientras ríe.
Lucas abraza su estómago y hecha la cabea hacia atrás para reír.
Lo miro ceñuda.
Hace la cabeza más hacia atrás y ríe de nuevo.
Me ignora y sigue riendo.
Lo miro cerca de 1 minuto.
No lo pienso en verdad.
Sólo quiero ver qué dice o hace.
Él suspira finalizando así con su risa incontrolable y levanta la cabeza peresosamente para mirarme.
Entrecierro los ojos.
Hablo sin pensar.
Saca una risilla. Me mira directamente unos momentos y luego su mirada cambia. Más salvaje y desafiante. No en sentido furioso. Sentido "Voy a Ligar".
Por mi parte, deduzco que parece que ´necesita lentes por la manera en la que tiene entrecerrados los ojos.
Arrugo la frente y me alejo unos centimetros.
¿Qué le pasa a este tipo?
Entonces el abre los ojos sorprendido.
Abre la boca para decir algo.
Finalmente abandona su cara perturbante...
Y se hecha a reír.
Levanto una ceja.
Lucas ríe más.
Ellie está parada a unos metros de nosotros.
Mira a Lucas con desaprovación, y una sonrisa.
Avanza hacia nosotros.
Ellie asiente.
Doy un respingo.
Ellie me mira.
La miro.
Pobre ingrata, no sabe nada.
Lucas y Ellie me miran fijamente.
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